¡Tachán! Me puse la nariz roja y conseguí sus sonrisas y un par de aplausos descoordinados. Siempre fui un poco payasote, ya me lo decía mi madre desde bien pequeño. Y ahora toca devolverles el favor, hacerles reír como me hacían reír a mí cuando caía enfermo. Es lo mínimo que se merecen, al menos durante la visita mensual.
2010-09-11- jose?
2 comentaris:
Jo tambè vull que em facis riure!
tu??? riure??? jajaja!!!!
m'agrada l'escrit!!! sobetot llegir-lo desprès de la teva experiència amb la canalla!! :-P
Petonsx2!
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